¿Tenemos derecho a la legítima de la herencia de un tío?

Existe la confusión generalizada de que, por el hecho de ser familiar de un fallecido, sea del grado que sea, se tiene un derecho natural a ser parte de la herencia. Y esto, realmente, no es así...

El Código Civil designa únicamente como herederos forzosos a los hijos o descendientes de éstos, los padres o ascendientes, y el cónyuge viudo. Fuera de estas categorías, no existe derecho a la legítima por parte de otros familiares. En consecuencia, el causante puede designar libremente en testamento a cualquier persona física, extraña o no, o bien jurídica, y dejarle todos sus bienes.

Pongamos un ejemplo: Es muy común el caso de un testamento de una señora que a los 85 años muere sin descendencia y viuda, después de haber pasado 10 años internada en una residencia de ancianos, siendo atendida y cuidada, y que ha decidido nombrar como sucesora a título universal a una de sus enfermeras, o bien a la residencia.

Conocido el fallecimiento la causante por parte de su hermano y sus tres sobrinos, hijos de otro hermano fallecido tiempo atrás, deciden iniciar los trámites para reclamar la herencia, alegando su condición de familiares de la causante.

Pues bien, en este caso, el testamento otorgado es perfectamente legal y válido en todas sus cláusulas, pues los familiares nombrados no son reconocidos por la ley como forzosos, por tanto, la heredera de todos los bienes será la enfermera nombrada en testamento, o la residencia si así lo ha decidido.
Serán éstos, por tanto, los llamados a la herencia que tienen la facultad, en su caso, de aceptar o renunciar a la misma.

Cuestión aparte representa la validez moral de dicho acto, circunstancia en la cual no entramos, pues no siempre moralidad y legalidad van unidas de la mano...

Pedro Fernández, Director del gabinete Jurídico pf&asociados