Afgano

Afgano

Descripción
Conocido también como Lebrel Afgano y Sabueso de Afganistán, el Afgano es un perro fuerte, altivo, potente y noble. El cuerpo y las patas son alargados y está cubierto por un pelaje muy largo y sedoso. El color puede ser cualquiera, aunque los más habituales son los tonos cremas y leonados. La cabeza es alargada y con el pelo más corto que en el resto del cuerpo, salvo en la frente y las orejas que tiene la misma longitud.

Origen
El galgo Afgano procede del Sinaí y es citado ya en los papiros egipcios de hace más de 5.000 años. Esta raza no se hizo popular en Europa y América hasta el siglo XX. El primer club del Lebrel Afgano fue fundado en el Reino Unido en el año de 1926 y ese mismo año fue reconocido como raza oficial por el Kennel Club Americano. El Afgano se ha usado tanto de perro de caza como perro de pastoreo.

Altura/Peso
Machos: entre 63 y 74 centímetros y un peso de entre 20 y 30 kilogramos
Hembras: entre 56 y 68 centímetros.

Temperamento
Valiente, dulce, inteligente, desconfiado pero no hostil. El carácter del galgo afgano es muy independiente, muchos lo califican como un poco gatuno, porque a veces es distante y distinguido. Esta raza es a menudo descripta como independiente y no muy obediente, por lo que resulta difícil de entrenar.
Es importante que el Afgano sepa quién tiene el mando y la superioridad desde el principio.
El Afgano ama la comodidad y el espacio, es por ésto que no es una elección ideal para quienes habitan lugares pequeños, ni casas con jardín pequeño. A pesar de su perfecto comportamiento doméstico, el Afgano es un perro de caza, muy apegado a sus dueños. Pero aunque a menudo feroz, sobre todo en la adolescencia.

Compañero ideal
Actualmente, por su belleza , es considerado perro de lujo. La aptitud para la guardia y el alto umbral para el ladrido de alerta y amenaza convierten al perro de raza afgano en un ideal para cumplir funciones de protección para aquellos que no desean tener problemas con los vecinos debidos al ladrido de su perro.

Problemas de salud
En el Afgano es conocida una enfermedad hereditaria que se manifiesta con una progresiva opacidad del cristalino que provoca graves trastornos en la visión. También está descrita una enfermedad que se origina por una aportación insuficiente de oxígeno o de sangre, a la médula espinal. No se conocen formas para curar esta enfermedad, capaz de causar la muerte del perro en un tiempo que va de los quince a los cincuenta días.

Cuidados
Los perros Afganos, al igual que la mayoría de las otras razas de perros, necesitan ejercicio diario y, cuando viven en áreas cerradas, necesitan ser sacados a caminar y ejercitarse periódicamente. Además, es importante que puedan tener acceso a agua fresca con facilidad, y durante temporadas de temperaturas altas. Su agua debería ser mantenida lejos de los rayos del sol y en un lugar fresco dado que, debido a su largo pelaje, necesitan poder refrescarse con facilidad. El pelaje de un perro Afgano implica atención especial debido a su longitud. Debe ser cepillado durante el baño y mientras está mojado, para que no pierda su brillo.

Esperanza de vida
Unos 10 años.

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