¿Cómo se trata el sobrepeso y la obesidad?

En la mayoría de los casos con dieta y con ejercicio físico es posible estabilizar nuestro peso cuando nos encontramos en una situación de exceso de peso u obesidad. Es muy recomendable hablar con tu médico o con tu enfermera de cabecera para que puedan echar una mano.

Respecto a la dieta, es importante señalar que existen dos problemas: uno es la cantidad excesiva que se soluciona comiendo menos y otro es la calidad pésima que se soluciona comiendo mejor. Una dieta pobre en hidratos de carbono, grasas y azúcares refinados y rica en vegetales y frutas es clave para conseguir reducir el peso y que esa reducción de peso sea estable. También es importante:
? Aumentar lo que se desayuna y disminuir lo que se come y se cena.
? Organizar al menos 5 comidas al día.
? Comer junto a otras personas y charlas con ellas sin que se encienda la televisión.
? Que toda la familia cambie de hábitos dietéticos.
? No picar entre horas y si hay una necesidad imperiosa, calmar la ansiedad con productos de escasa densidad calórica (pepinillos o cebolletas en vinagre o zanahoria cruda son aceptables).

Respecto a la bebida, lo recomendable es beber agua. Fuera de celebraciones y momentos especiales, ni zumos, ni vino, ni cervezas, ni bebidas azucaradas y carbonatadas.

En cuanto al ejercicio, no vale uno cualquiera. Es importante que sea diario, que sea constante, que sea de más de 30 minutos (lo ideal puede ser caminar deprisa una hora) y que se adapte a lo que a uno le gusta y a lo que uno puede hacer. Buscarse a un compañero o a varios suele ser lo ideal para conseguir que el hábito permanezca.

Aunque parezca una tontería, ver la televisión engorda: es mejor charlar o leer un libro o una revista. Ser activo mentalmente también ayuda a adelgazar.