7 claves para vivir más sano
Los alimentos influyen en la capacidad de frenar el envejecimiento.
Existen diferentes tipos de memoria. Cuando hablamos de memoria emocional, estamos haciendo referencia al sistema que nos ayuda a fijar los recuerdos a partir de las emociones.
El sistema de la memoria emocional funciona en estrecha relación con los otros dos (memoria procedimental y memoria declarativa), particularmente con el de la memoria declarativa. Nos ayuda a fijar nuestros recuerdos etiquetándolos de acuerdo con nuestras emociones: cuando algo nos conmueve, nos hace reír o nos produce placer somos capaces de recordarlo más fácilmente.
A menudo se dice que un niño no tiene recuerdos antes de los 3 años. A esa edad se tienen, es cierto, muy pocos recuerdos personales. Pero ello no significa que el niño no tenga memoria. De hecho, durante esos pocos años, su memoria procedimental ha estado funcionando incansablemente: ha aprendido a dirigir la cabeza, a sentarse, a coger cosas con las manos, a caminar, etc. Y otro tanto puede decirse de su memoria cultural, ya que ha aprendido a hablar, y el lenguaje es una adquisición cultural que comparte todo el mundo. Además, el niño utiliza su memoria emocional, ya que reconoce caras, voces, olores, los sabores que le gustan, los que le disgustan...
Imprime y pon en práctica estos sencillos ejercicios de memoria para mantener en forma tu cerebro.
Es la encargada de traer a "nuestra cabeza" los recuerdos y ocupa un lugar primordial en el sistema cognitivo pero ... ¿qué más?
La memoria declarativa es aquella en la que se almacena información de hechos que suceden o aprendes a lo largo de tu vida.
La memoria procedimental guarda información sobre procedimientos de nuestras interacciones con el entorno que nos rodea.
Percibimos a través de los sentidos y esta percepción, ya tamizada, es la que queda en nuestra memoria, ¿cómo influyen, por tanto los sentidos en nuestra vida?
Gusto, vista, oído, tacto y olfato... Desde que estamos en el vientre de nuestra madre hasta el último día de nuestra vida, los cinco sentidos son la puerta de acceso de nuestra memoria.