Museo del juguete antiguo, Ciudad de México

Roberto Shimizu, un arquitecto mexicano de origen japonés, lleva desde 1955 coleccionando juguetes, hasta reunir más de un millón de piezas. 10 000 de ellas las exhibe en su casa, convertida en el Museo Antiguo del Juguete.

Desde el año 2000, la colección se mostraba parcialmente sólo a clientes, amigos y familiares.
En septiembre del 2006, se abrieron las puertas al público en general de manera gratuita y sin fines de lucro, con el propósito de darla a conocer a todos los habitantes de México.

En el museo se pueden encontrar juguetes de los siglos XIX y XX, principalmente de México, pero también de otros países. La mayoría de ellos han sido rescatados de tianguis y mercados de pulgas.
Dentro de este acervo cuenta con: carritos de madera, metálicos y de plástico, locomotoras, barcos, futbolitos, trompos, yoyós, baleros, patines del diablo, bicicletas, tiros al blanco, una estación espacial de reabastecimiento, un platillo volador que actualmente sirve como exhibidor de una colección de robots japoneses y mexicanos, juguetes musicales, juguetes de cuerda, bateria y fricción, etc.
Una de las piezas más llamativas del museo es un circo de pulgas milimétricas hechas de papel.