¡Empieza ya a ahorrar de cara a la jubilación!

Nunca es tarde para empezar y, sobre todo, cuando antes comiences, mejor. Las pensiones públicas -se nos advierte de manera continuada desde hace años- están amenazadas por el incremento constante de la población mayor y su mayor peso sobre el total de la población. La reforma de las pensiones planteada España se traducirá en la práctica en trabajar un mayor número de años para recibir unas pensiones de jubilación de menor cuantía. ¿Suficientes para vivir como estábamos acostumbrados? Seguro que no.

Tener el futuro económico en un único cesto -el cesto público- es, por tanto, un grave error que hay que subsanar recurriendo al ahorro individual. Gestionar los ahorros para el futuro se puede hacer de varias formas. La primera, de forma personal. ¿Cómo? Invirtiendo los ahorros en metálico, comprando un local o adquiriendo joyas, obras de arte, oro, etc. También es posible constituir depósitos bancarios o comprar acciones y obligaciones en los mercados de valores. En ningún caso, por supuesto, guardar el dinero en metálico sin más, ya que la inflación acabará con una buena parte de los fondos ahorrados.

La segunda fórmula para comenzar a ahorrar es recurrir a alguna entidad u organización para constituir sistemas de previsión y jubilación.

Las únicas reglas para invertir son la diversificación de las inversiones y, sobre todo, la prudencia. Como regla general, cuantos más años falten para la jubilación, más se puede arriesgar para conseguir altas rentabilidades. Pero, cuando queda poco tiempo para la retirada laboral o ya se ha alcanzado se impone la prudencia. Es prudente que revises tus inversiones y las concentres en alternativas conservadoras.