La gran limpieza de tu ordenador

El gran problema con un ordenador es que acumula polvo pero, sobre todo, que no se queda únicamente en la superficie. La electricidad estática actúa como un imán sobre los granos de polvo que vuelan por nuestra casa o por el despacho. ¡Pero eso no es todo! El ventilador que está en el interior de tu equipo absorbe aire para refrigerar las diferentes piezas de la máquina. Este aire contiene también polvo y, después de un tiempo, una gruesa capa de suciedad cubre todas las piezas. Esto impide la correcta refrigeración de la máquina, lo que es nefasto para tu trabajo. Puedes perder todos los datos no guardados si tu ordenador se detiene de pronto por un sobrecalentamiento. El polvo contiene, además, partículas eléctricas que se pueden depositar entre dos puntos que estén unidos y de esta forma puede provocar un cortocircuito.

Pero no es sólo la torre la que se llena de polvo. Lapantalla, el teclado y el ratón también se convierten en un nido de suciedad después de cierto tiempo. Por tanto, igual que en el resto de la casa, tu ordenador debe someterse de vez en cuando a una gran limpieza.

No te lances sobre el primer producto de limpieza que encuentres en casa. La mayoría de esos productos contienen disolventes susceptibles de dañar los elementos de plástico o, en el mejor de los casos, la capa de protección que, una vez dañada, atraerá aún más polvo.

La mejor solución consiste en utilizar productos especialmente concebidos para la limpieza de los ordenadores. Generalmente, los puedes encontrar en tiendas especializadas en electrónica o material de oficina. Recuerda que el líquido es el principal enemigo del ordenador, por tanto no utilices jamás sustancias líquidas para limpiar el ordenador, sino productos a base de espuma.

La pantalla
• Polvo, huellas de dedos... ¡en la pantalla es donde más se ven las huellas! La primera cosa que debes hacer es quitar la pelusa con un paño suave y sin felpa, como por ejemplo una gamuza de microfibras, disponible en las grandes superficies. No utilices papel de cocina para limpiar tu pantalla porque la llenará de arañazos y no se quedará limpia.
• Puedes limpiar las rejillas de la parte trasera de la pantalla con un aspirador a baja potencia.
• No utilices un limpiacristales normal. Contiene ciertos productos peligrosos para las nuevas pantallas LCD, que no están fabricadas de cristal sino de material sintético.
• También encontrarás en las tiendas especializadas, productos especiales para las pantallas y productos de limpieza con activos antiestáticos. Atención, no dejes jamás ninguno de estos productos actuar durante demasiado tiempo. Seca la pantalla después de un minuto con una gamuza de microfibras.
• No apliques jamás el producto que vayas a utilizar directamente sobre la pantalla sino sobre el paño.
• No frotes demasiado fuerte