Jubilados: ¿A qué dedicas el tiempo libre?

Las encuestas dicen que ocho de cada diez españoles mayores de 65 años así lo cree. Están convencidos de que la edad no es un obstáculo para emprender nuevas actividades; sin embargo, no son muchos los que actúan en consecuencia a tenor de esos mismos datos estadísticos.

Entre las actividades nuevas que los mayores españoles desearían hacer figura, en primer lugar, el turismo, seguido del deporte, cursos de manualidades y otras actividades formativas. Salir a bailar o asistir a espectáculos también son pasatiempos deseados, sobre todo lo segundo, especialmente por los hombres. Asistir a centros de ocio especiales para la tercera edad va a continuación. En último lugar, las actividades que suscitan menor interés son las relativas al voluntariado social, que solo le parecen atractivas a seis de cada 100 mayores, de acuerdo con la Encuesta de Condiciones de Vida de los Mayores.

El turismo, la excepción

Lo que ocurre es que esas preferencias se diluyen a la hora de llevarlas a la práctica, con la única excepción del turismo. «Viajar se ha convertido en una práctica muy común entre los mayores españoles gracias al papel que ha jugado el Imserso», explica la socióloga Lourdes Pérez Ortiz, profesora de la Universidad Autónoma de Madrid, que ha dedicado gran parte de su carrera profesional al estudio de los hábitos de las personas mayores en España. «Sin la labor de difusión que ha hecho este organismo, a muchos mayores ni siquiera se les habría ocurrido; no tanto por poder adquisitivo -explica la socióloga- como por el nivel de formación y por la falta de costumbre».

El hecho es que los mayores españoles viajan y lo hacen bastante más que las personas de su misma generación de otros países europeos. De acuerdo con los datos de Eurostad, en el año 2003 en España hubo unos dos millones de turistas mayores, lo que quiere decir que de cada nueve turistas españoles uno era mayor de 65 años. El resultado es que viaja el 29,2 por ciento de los mayores españoles, una tasa muy superior a la de Bélgica, Finlandia o Portugal, aunque menor que la de Dinamarca o Alemania.

Cuatro horas libres al día

A la hora de la verdad, además de a viajar, ¿a qué dedican su tiempo libre los españoles de más de 65 años? Según la Encuesta de empleo del tiempo del INE, los mayores tienen de media casi cuatro horas más de tiempo libre al día que el resto de los españoles. De ese tiempo, la mitad lo emplean en los cuidados del hogar y en los personales. El resto lo dedican a actividades de ocio que se reducen a la audiencia de medios de comunicación, vida social y actividades deportivas. ¿Dónde quedan, entonces, esas actividades nuevas que les encantaría emprender y para las que la edad no representa un freno?

«Todos dicen que sí, que la edad no es un obstáculo, pero luego se limitan a pasear y a esas otras cosas que, a mi modo de ver, componen un ocio poco creativo, constructivo o enriquecedor. Su ocio se centra en la familia y en no hacer mucho más», dice Lourdes Pérez Ortiz.

Una nueva «vejez moderna»

Esta parece ser la realidad que se desprende de las encuestas disponibles en la actualidad. Sin embargo, Lourdes Pérez Ortiz está empeñada en embarcarse en una investigación más ambiciosa con el ocio de las personas mayores como objeto de estudio. Sostiene que en España aún no disponemos de datos suficientes que den una panorámica completa de las actividades de ocio de los mayores, ni de sus gustos y aficiones. Pero cree que un estudio más pormenorizado podría dar unos resultados, si no equivalentes, bastante próximos a los que ya vislumbran en otros países europeos, entre ellos Francia, donde existen indicios de la emergencia de un nuevo tipo de vejez, la denominada «vejez moderna», implicada en actividades de formación y de voluntariado, un sector que va en aumento en detrimento de los otros dos grupos preexistentes: la «vejez tradicional», con un ocio pasivo, y la «vejez tercera edad», a la que le gustan los viajes y espectáculos específicos para mayores. Aunque, apostilla Lourdes Pérez Ortiz, «los españoles mayores de 65 años son unos siete millones, y necesariamente tienen que ser muy diferentes».

Ellas no se jubilan

Las encuestas demuestran que las mujeres están implicadas menos que los hombres en las actividades de ocio. «Están muy pegadas a la casa, salen a hacer la compra..., pero dedican al ocio mucho menos tiempo que los hombres, y es así en cualquiera de las actividades, desde ir al parque hasta cualquier otra cosa», afirma Lourdes Pérez Ortiz, quien hace un par de años ya publicó un interesante estudio sobre las mujeres mayores en España, titulado Envejecer en femenino. Las mujeres mayores en España a comienzos del siglo XXI.

La interpretación que apunta la socióloga para explicar esta actitud es que «ellas no quieren que se las vea por la calle a media mañana sin hacer nada. Salen con el carro de la compra y se van encontrando a gente, a amigos, pero no quieren que nadie piense que están pasando el rato. Los hombres, por el contrario, creen que, una vez jubilados y con el deber cumplido, tienen derecho a disfrutar de su ocio. Nadie se asombra si los ve por la calle 'perdiendo el tiempo'. Ellas, por el contrario, no sienten que haya terminado su vida laboral, porque siguen ocupándose, como siempre, de las tareas domésticas».

P. H.